Reconocimiento y compromisos en la 'cumbre' del Tercer Sector con Mas

Los presidentes y presidentas de las 32 federaciones de entidades sociales que conforman la Mesa del Tercer Sector y su presidenta Àngels Guiteras se han reunido este martes con el Presidente Artur Mas en una 'cumbre' de más de dos horas en el Palau de la Generalitat. Los representantes de 4.000 entidades sociales catalanas han transmitido a Mas un balance equilibrado de lo que ha ido bien este último año, lo que falta por avanzar, y le han planteado también nuevas propuestas para el futuro. Además del Presidente, asistieron a la reunión la consejera de Bienestar Social y Familia, Neus Munté; el consejero de Empresa y Empleo, Felip Puig; el secretario del Gobierno, Jordi Baiget y el secretario de Vivienda, Carles Sala.

La consejera Munté ha destacado que la cumbre es también una forma de visibilizar y reconocer la "gran tarea" del Tercer Sector Social. La presidenta Guiteras, a su vez, ha remarcado que valoran positivamente los avances que ha hecho el Gobierno, tanto en temas sociales como de reconocimiento del Tercer Sector, al tiempo que remarcó el Presidente Mas la importancia de que se cumplan las resoluciones para la lucha contra la pobreza aprobadas en el Pleno monográfico del Parlamento de Cataluña de los pasados ​​12 y 13 de marzo.

Medidas contra la pobreza
En especial, la Mesa del Tercer Sector considera imprescindible que el Gobierno lleve a cabo la reforma pendiente de la Renta Mínima de Inserción en la dirección que el propio Parlamento aprobó, porque es el principal instrumento que la Generalitat tiene hoy para proteger los col colectivos con mayor riesgo de exclusión social. El Gobierno ha adquirido el compromiso de mantener el próximo año la convocatoria extraordinaria de ayudas para luchar contra la pobreza, que Bienestar Social y Familia ha impulsado este 2014 para 2 millones de euros, y aumentar la incluso en la medida de lo que sea posible, según Neus Munté.
La presidenta de la Mesa también ha pedido a Mas que el Gobierno impulse el Pacto para la lucha contra la pobreza que el Parlamento también pedía, con el consenso con los partidos y agentes sociales del país más amplio posible. Gobierno y Tercer Sector han coincidido en la firme voluntad de seguir trabajando. Mientras este gran acuerdo no llega a concretar, sin embargo, la Mesa ha pedido al Gobierno que cree un grupo de trabajo con el Tercer Sector para impulsar medidas urgentes que vayan más allá de las que en aquel Pleno el Parlamento aprobó. Una de ellas es la puesta en marcha de una nueva prestación que asegure unos ingresos mínimos de 465€ mensuales a las cerca de 34.000 familias catalanas con hijos o dependientes a cargo que hoy no tienen ingresos de ningún tipo. Según Munté es una propuesta para estudiar y trabajar, pero ha apuntado la posible contradicción entre las soluciones propuestas, recordando la demanda que se ha hecho en otras ocasiones para compactar y simplificar las prestaciones existentes y evitar la dispersión.
Otra medida urgente que también prioriza la Mesa es que el Gobierno reanude las ayudas de la dependencia que fueron suspendidas en septiembre de 2013 y que lo haga de forma prioritaria para las personas con pocos recursos que no pueden pagar el servicio que necesitan. Neus Munté ha reiterado el compromiso de reactivar las Prestaciones Económicas Vinculadas en el ámbito de la ley de la Dependencia el próximo mes de septiembre, "atendiendo a la mayor vulnerabilidad de las personas".

Desde el ámbito de la discapacidad
Si bien la pobreza ha sido uno de los principales temas abordados durante el encuentro, se han tratado también otros como la creación de empleo, la vivienda, la atención a colectivos como las personas con discapacidad o en situación de dependencia.
Antonio Guillén, presidente de Ecom, intervino en nombre del Cocarmi (Comité Catalán de Representantes de Personas con Discapacidad), del que es también presidente, y ha hecho de portavoz de todo el colectivo de las personas con discapacidad, las personas dependientes y sus familias, "fuertemente castigado-remarcó- los últimos años por las diferentes decisiones políticas". La vulnerabilidad de las personas con discapacidad y las dificultades para afrontar la situación de crisis han crecido, y también se ha agravado el sufrimiento y la precariedad de muchas personas mayores. Se ha creado una fractura social, afirmó Guillén, difícil de revertir si no se incrementan los recursos destinados a políticas sociales para poder ejercer el principio de igualdad de oportunidades y construir una sociedad más justa, inclusiva y cohesionada. Por ello, ha pedido a Mas y su Gobierno que considere las políticas sociales como una inversión.
Además le pidió que recupere las prestaciones y condiciones laborales de los cuidadores familiares, en el ámbito de la ley de Promoción de la Autonomía personal y Atención a las Personas en situación de Dependencia (LAPAD); que se promueva la figura del asistente personal y se priorice la promoción de la autonomía personal; que se reanuden las prestaciones económicas vinculadas a los servicios residenciales o que potencie los servicios de ayuda a domicilio, de respiro y los servicios psicosociales y psico-educativos.
Asimismo ha comunicado que el colectivo deposita su confianza en algunas medidas como el Plan Integral de atención a las personas con trastorno mental y adicciones presentado el 14 de julio; en la creación del Consejo de la Discapacidad de Cataluña (CODISCAT); y en el diálogo entre el Gobierno y las entidades sociales para revertir la erosión de los derechos conquistados y de las políticas de protección social.