La Mesa del Tercer Sector insta al gobierno ya los partidos a hacer frente común en defensa del modelo de inserción laboral de Cataluña
MÁS DE 200 ENTIDADES SOCIALES queda afectada por la RECORTE DEL GOBIERNO CENTRAL EN LAS POLÍTICAS DE EMPLEO
El recorte prevista de 256 millones de euros por parte del Estado en las transferencias para políticas activas de empleo en Cataluña este año 2012, afectará gravemente a un gran número de entidades sociales y los colectivos que atienden, destruirá puestos de trabajo y hará peligrar el modelo de inserción propio de Cataluña para estos colectivos, caracterizado por una estrecha cooperación entre las políticas públicas y las entidades del Tercer Sector Social, y por la articulación eficaz de intervenciones diferentes: incentivos fiscales, políticas activas, la cooperación con empresas socialmente responsables, y el desarrollo de empresas de la economía social. Todo un modelo de inserción y acompañamiento desarrollado por las entidades sociales catalanas para prevenir y reconducir procesos de exclusión social.
La Mesa del Tercer Sector Social, de la que forma parte la Confederación ECOM Catalunya, estima que más de 34.000 personas de estos colectivos especiales pueden quedar desatendidas, 2.500 trabajadores y trabajadoras con discapacidad o trastorno mental de Centros Especiales de Trabajo pueden perder su trabajo, y que deberán ser despedidas más de 900 personas formadoras y orientadoras laborales de más de 200 entidades que cada año consiguen 12.000 inserciones en el mercado de trabajo de personas en riesgo de exclusión. Estas entidades pertenecen a las federaciones y organizaciones siguientes: ACAPPS, Cruz Roja, DINCAT, ECAS, ECOM, FECAFAMM, FESOCA, Foro de Salud Mental, Fundación Catalana del Esplai y Fundación Pere Tarrés.
Asimismo, hay que tener en cuenta no sólo el impacto sobre los trabajadores actuales sino también el impacto a más largo plazo sobre el derecho al trabajo de las personas con discapacidad o las personas con trastorno mental, que se añadirá a las actuales limitaciones para su acceso al mercado de trabajo, un hecho que compromete gravemente la continuidad del modelo de inclusión social y laboral catalán.
En Cataluña un gran número de entidades del Tercer Sector Social colaboran con la sociedad catalana en la formación, orientación e inserción socio-laboral de los colectivos con especiales dificultades de acceso al mercado de trabajo: personas con discapacidad intelectual , física y sensorial, personas con trastorno mental; jóvenes que han fracasado en la escuela; perceptores de rentas mínimas; parados y paradas de larga duración, personas mayores de 45 años, etc.
La tarea de promoción y de contención que llevan a cabo todas estas entidades sociales es fundamental e insustituible para que miles de personas vulnerables de Cataluña dispongan de igualdad de oportunidades en el acceso al mundo del trabajo y no lleguen a la exclusión .
Por ello, y ante la gravedad de esta situación y del perjuicio que podría causar en la cohesión general del país, la Mesa de entidades del Tercer Sector Social de Cataluña ha instado al Gobierno y todos los partidos políticos catalanes a hacer un frente común ante el gobierno del Estado para que ninguna entidad social vaya a desaparecer, para preservar los puestos de trabajo en el sector, y para que el impacto sobre las personas vulnerables afectadas sea el menor posible, priorizando los recursos disponibles hacia la atención de estas personas a través de las entidades del Tercer Sector Social.
La Mesa del Tercer Sector lamenta que el pasado jueves, 10 de mayo, los grupos parlamentarios no fueran capaces de ponerse de acuerdo para aprobar una resolución conjunta sobre este tema.
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