Empieza la cuarta edición del proyecto Dona, Alça el Vol
Un año más, un grupo de mujeres con discapacidad física y/u orgánica se han incorporado al equipo de ECOM para conocer sus derechos, empoderarse y generar una transformación a través de su activismo y de su participación en la sociedad.
El proyecto Dona, Alça el Vol es una iniciativa de ECOM que nació el 2019 y que tiene por objetivo promover el empoderamiento de las mujeres con discapacidad física y/u orgánica y dar visibilidad a las múltiples violencias que sufre el colectivo, especialmente en el ámbito de la incorporación al mercado de trabajo.
Este año se han incorporado al proyecto 6 mujeres con discapacidad que se convertirán en agentes de cambio, puesto que a partir de su experiencia, su conocimiento y su activismo promoverán cambios en la visión que tiene la sociedad de la mujer con discapacidad. En el marco de este proyecto, también se ha incorporado una técnica de igualdad, para continuar trabajando la perspectiva de género en la entidad y en los proyectos que se desarrollan, y acompañar el personal técnico de la entidad en su capacitación en este ámbito.
6 mujeres con discapacidad física y/u orgánica levantarán el vuelo gracias al acompañamiento profesional y personal desde ECOM
Natalia, Montse, Irene, Esther, Edith y el Iris son las seis mujeres que se han incorporado a la edición de este año del proyecto Dona, Alça el Vol. Ellas no solo recibirán formación en materia de derechos, sino también formación para su desarrollo personal y profesional.
En este sentido, entendemos que las mujeres que se incorporan al proyecto necesitan una formación personal, para poderse convertir en agentes de cambio y, desde ECOM, se considera necesario que una parte del proyecto vaya destinada a la concienciación sobre las múltiples discriminaciones que sufren las mujeres con discapacidad. Estas discriminaciones pueden ser por razón de género y de discapacidad, aunque también pueden ser por otros ejes de discriminación. En este sentido, se quiere reforzar con este grupo la concienciación sobre las discriminaciones que sufren y así, trabajar el empoderamiento.
Al mismo tiempo, las mujeres que se incorporan al proyecto cuentan con un acompañamiento del Servicio de Inclusión Laboral de ECOM para favorecer su inclusión en el mercado laboral. El objetivo es que, una vez acabe el proyecto, tengan el mayor número de herramientas y de conocimiento posible para defender sus derechos y, a la vez, incorporarse al mercado de trabajo.
Cada una de las mujeres del proyecto Dona, Alça el Vol aportará su bagaje y sus conocimientos, de forma que, entre todas, se enriquecerán mutuamente.
Natalia Iniesta nos ha explicado que tiene ganas de empezar con el proyecto, “de aportar su parte de conocimiento y probar nuevas experiencias con este gran proyecto”, que ofrece ECOM.
Para Montse García, este proyecto es “un camino para encontrar y para aprender con mujeres con su misma discapacidad” y, al mismo tiempo, es una oportunidad para “aprender de todas y aportar las experiencias” vividas.
Irene Tonya vive este proyecto como “una oportunidad para participar promoviendo el cambio en el sector social con un pequeño grano de arena” y nos comparte que esto es una cosa que la hace sentir realizada y cree que le aportará conocimientos en el ámbito profesional y en valor humano.
Esther Pinto tiene experiencia como recepcionista y en el ámbito sanitario, pero explica que le apetecía hacer un cambio, a pesar de que no estaba segura hacia donde quería ir. Este proyecto, dice, “la ha ilusionado mucho”. Ya solo para empezar, le motiva el nombre “Dona Alça el Vol” (Mujer, Alza el Vuelo), pero, además, la llama el hecho que es un proyecto que da visibilidad a la mujer en el ámbito laboral.
Si a Edith Turc le preguntan que la ha impulsado a entrar en este proyecto, no lo tiene demasiado claro. Pero, si le preguntan que la ha impulsado a continuar con él, entonces responde que “es uno de los proyectos más alentadores que ha visto nunca”. Cree que lo que ella puede aportar al proyecto es “perspectiva”, uno de los aspectos más esenciales cuando hablamos de discapacidad y género.
Por último, Iris González busca empoderarse algo más con esta iniciativa, para enriquecerse y lanzar su proyecto, y añade que quiere conocer ECOM y aprender todo el necesario.
Una cadena de transformación social
Las seis mujeres que han sido seleccionadas, no solo serán las beneficiarias del proyecto, sino que también serán las ejecutoras –cosa que supone un trabajo y un sueldo- y dentro de esta iniciativa tendrán que dinamizar actividades de sensibilización, apoyarán a las empresas y también dinamizarán focus groups, entre otras actividades.
De este modo, el conocimiento, la concienciación y el empoderamiento sobre las discriminaciones que sufren como mujeres con discapacidad física y/u orgánica, podrán ser utilizados para transformar su entorno y, de este modo, que su entorno continúe cambiando las personas de su alrededor. Se trata, pues, de generar una cadena de transformación social.
Este proyecto ha sido financiado gracias a la convocatoria de subvenciones para programas de interés general a cargo 0,7% del IRPF del Departamento de Trabajo, Asuntos sociales y Familias de la Generalitat de Catalunya.