La discapacidad continúa siendo la tercera razón de discriminación en la ciudad de Barcelona, según el Informe del Observatorio de las Discriminaciones 2020
El Observatorio sobre las Discriminaciones de Barcelona ha publicado un año más el informe sobre las discriminaciones en Barcelona, en qué ECOM hemos participado aportando datos sobre los casos de discriminación que atendemos en la entidad, por tercer año consecutivo. El estudio, que se presentó el pasado martes 29 de junio, indica que la discapacidad continúa siendo la tercera razón de discriminación en la ciudad, con un 10,8% de los casos de discriminación y, de estos, el 85% son reportados por personas con discapacidad física.
"Salí a pasear con mi madre y nos vino la policía a llamarnos la atención porque yo iba del brazo, cogida de mi madre porque no llevaba las muletas. Nos querían denunciar, nos querían poner una multa por no mantener la distancia de seguridad". Así relataba Maria Girbau, durante la presentación, una discriminación que había vivido ella misma durante este tiempo de pandemia, por razón de discapacidad física. Se trata uno de los muchos ejemplos con los cuales se han encontrado las personas con discapacidad física y/o orgánica ante las restricciones y los protocolos para gestionar la pandemia de la Covid-19.
La responsable del área de Defensa de Derechos de ECOM, Inma Gómez, constataba que "muchas personas no han sentido, como es el caso de las personas con discapacidad física, que estuvieran incluidas en los protocolos de gestión de prevención, ni estas medidas de urgencia que, por ejemplo, comentaba la María".
Los datos recogidos en el Informe del Observatorio de las Discriminaciones en Barcelona 2020 lo confirman. Según el documento, en 2020 las discriminaciones por parte de la administración pública aumentaron 5,7% respecto al año anterior, hecho que representa un 49% de los casos. Además, entre las situaciones de discriminaciones reportadas al Observatorio, ha habido un 20% más de casos de discriminaciones en el espacio público, que han pasado del 2% el 2019 al 22% el 2020.
El informe destaca que las entidades, entre ellas la entidad ECOM en la que estamos especializados en la defensa de los derechos de las personas con discapacidad física, "se ha denunciado la invisibilidad de estos colectivos durante la pandemia". Además, también se hace mención a una encuesta que se llevó a cabo desde ECOM a 212 personas usuarias de los servicios de la entidad, en que el 87% de las personas participantes consideraban que los protocolos diseñados por la administración pública para gestionar y combatir la Covid-19, "no han tenido en cuenta ni la realidad ni las necesidades de las personas con discapacidad".
Esta encuesta también detalla que "el 74% cree que desde la administración no se han proporcionado medidas específicas para garantizar el derecho a la autonomía personal de las personas con discapacidad", explica el informe. Muchas personas con discapacidad necesitan el apoyo de una tercera persona para llevar a cabo las actividades de la vida diaria y, durante la pandemia, algunos servicios de asistencia domiciliaria o personal han reducido sus horas de atención. Aun así, las personas han pasado más tiempo a casa, por lo cual el informe denuncia que "desde la Administración no se hayan proporcionado medidas específicas para garantizarles el derecho a la autonomía personal".
Además, un 84% de las personas encuestadas también consideran que "la administración no ha proporcionado suficientes ayudas y prestaciones para dar respuesta a las necesidades generadas por esta situación", tal como describe el informe. Según un estudio de la ciudad de Barcelona, el agravio económico comparativo que sufren las personas con discapacidad supone un sobreesfuerzo económico de entre 17.000 y 41.200 euros anuales para las personas con discapacidad y sus familias.
La publicación del Observatorio también comenta "la carencia de priorización dentro de los protocolos de detección de la Covid-19 y de vacunación" de las personas con discapacidad. Las entidades del tercer sector han denunciado durante este tiempo que no se haya tenido en cuenta que las personas con discapacidad son un colectivo de riesgo que, en muchos casos, sufren problemas de salud asociados a la discapacidad y, además, en algunos casos también tienen más riesgo de contagio porque no pueden mantener la distancia de seguridad.
Los retos de futuro ante estas discriminaciones que todavía siguen sufriendo las personas en la ciudad de Barcelona son muchos. Aun así, Inma Gómez señalaba uno de los retos principales durante la presentación del informe: "identificar las discriminaciones", porque "las políticas de prevención solo son posibles con la identificación previa de los problemas y de las discriminaciones".